Cada viernes del 2018 memorizaremos un verso bíblico. ¿Para qué? Para que lo tengas en la mente y en el corazón, y no solo en la app, o en un cuadrito en la sala de tu casa.
El verso de Enero 12: Memoriza un verso bíblico #1 fue sobre la salvación, específicamente Juan 1:12, recordando que no depende de cómo nos sentimos, sino de creer y confiar en Dios, de lo que él ya hizo.
Hoy quiero compartirte un verso sobre el perdón.
En una ocasión un amigo me preguntó ¿te ha pasado que pides perdón a Dios, pero no te sientes perdonado?
¡Le respondí que me pasa eso muchas veces! Cierro mis ojos, hago una oración pidiendo perdón a Dios porque hice algo que fue incorrecto, termino la oración y espero sentir el airecito de la Rosa de Guadalupe, y nada. Él me hizo otra pregunta: «entonces, si no te sientes perdonado, ¿quiere decir que Dios no te perdonó?» No sabía que decir, pero pensaba que si no siento algo entonces quizá no he sido perdonado.
Gracias a Dios, mi amigo era bautista, y los bautistas ponen mucho esmero al aprender y explicar los versos bíblicos. Él me recordó lo que dice 1 Juan 1:9
Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad.
1 Juan 1:9
Confesar es el primer paso. Después viene el perdón, pero no solo te perdona, sino que sabe que lo malo que hacemos nos mancha, y por eso también nos limpia.
Confesión – Perdón – Limpieza
La próxima vez que pidas perdón y no sientas algo, recuerda que Dios nos perdona, independientemente a nuestras traicioneras emociones. Saber que al confesar nuestro error, él perdona y limpia nuestra vida, es motivo de alegría. Lleva contigo este verso durante este día, y memorízalo también.