Mamá, ¿proteges o sobreproteges?

Hay una gran diferencia entre la protección y la sobreprotección, y hay algunas veces en que confundimos esto, tanto padres, madres y también los hijos. Y en este artículo quiero hablarles de puntos clave para reconocer la gran diferencia entre estos dos.

Mamás que protegen

Una mamá que protege, es una mamá que está pendiente de sus hijos y de que no les pase nada malo, pero siempre dejando que ellos también aprendan de los errores y de que VIVAN su vida, la mamá está ahí para ellos cómo una guía para sus hijos; así cómo es una mamá leona con sus cachorros: cuando son pequeños les cuida pero también les enseña cómo defenderse, y cuando son grandes, deja que ellos mismo aprendan y cacen por sí solos a sus presas. En pocas, dejan que ellos hagan las cosas por sí mismos.

Los hijos que tienen una sana protección de parte de mamá siempre van a tener un apoyo en ella, van a estar cimentados en lo que ella les enseñó cuándo eran pequeños, y cuándo ya sean lo suficientemente adultos y se valgan por sí mismos, serán personas seguras, que saben hacer las cosas por sí solos sin depender de mamá.

Mamás que sobreprotegen

Es normal que una mamá proteja a su hijo, pero una mamá que sobreprotege exagera toda situación. Están pendientes de sus hijos, pero a un nivel extremo. Infunde miedo en su hijo/a, porque desde que son pequeños les van a enseñando que todo (absolutamente todo) es malo y causa daño. Una mamá que protege, enseña lo que es correcto o lo que no es correcto, pero no hasta el punto de reclamar todos los días y todo el tiempo por algo que piensan o hicieron sus hijos.

Hay muchas desventajas cuando sobreproteges, empecemos por lo básico:

  • Quieras o no, generarás una inseguridad tremenda y un miedo al mundo exterior y a lo que hay fuera de su casa; van a ir con un miedo caminando por la calle, porque van a vivir en una burbuja, pero cuando crezcan y se reviente la burbuja en la que viven, se darán cuenta de la realidad en la que están y entonces los golpes de la vida les enseñarán a lidiar con la realidad y cultura que vivimos en este país.
  • La inseguridad que transmites generará dependencia, al punto de esperar tu aprobación para tomar sus propias decisiones estando ya en el colegio, universidad, y aún estando en un trabajo.

Conozco el caso de una hija que habló con su mamá sobre un problema en su trabajo, solo le estaba comentando, y su madre le dijo: “Pásame el número de tu jefe para llamarle en este mismo instante.” 

Qué terrible que se llegue a ese punto.

Mamá si eres sobreprotectora y estás leyendo esto, reflexiona un poco. No llegues al punto de llamarle al jefe de tus hijos para solucionar los problemas, deja que ellos vean por sí mismos que ya están lo suficientemente grandes, que es tiempo de dejarlos volar, si tienen alas ¡que vuelen por sí solos!

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