Luego Samuel tomó una piedra grande y la colocó entre las ciudades de Mizpa y Jesana. La llamó Ebenezer (que significa «la piedra de ayuda») porque dijo: «¡Hasta aquí el Señor nos ha ayudado!».
1 Samuel 7:12Nueva Traducción Viviente
Estamos por terminar el año y un agradecimiento no vendría mal.
Muchos se cuestionarán el agradecimiento, otros lo verán con futilidad y otros tendrán más que el número de los dedos para agradecer.
Lo cierto es que los humanos somos olvidadizos, David escribió en los salmos “Bendice alma mía a Jehová y no olvides ninguno de sus beneficios”. Por ahí surgirán pensamientos como – Es que entiéndeme a mi también, como puedo agradecer si este año perdí…..
Por hoy este snack bíblico no trata de entenderte porque en realidad yo también no entiendo el por qué de varias situaciones, pero al igual que Samuel del pasaje bíblico puedo decir con autoridad al ver a los enemigos retirarse “ Eben-ezer,[ diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová. ”
Lo que me encanta de Dios es que nos proporciona guía diaria las 24 horas, Él no nos dijo: “ahora que son salvos, sobrevivan acá en la tierra, llegarán si pueden a la meta, nos vemos en el cielo”
Él siempre ha demostrado estar con nosotros y que ya está delante de nosotros, en el mañana pero sin dejarnos en nuestro presente. Esas acciones que solo Dios puede hacerlas.
Admitámoslo siempre hay algo bueno en todos los días, por lo menos una razón y si por sola esa razón tendremos que dar gracias pues que sea con todo nuestro ser porque el agradecimiento es como las victorias de la fe, grandes o de poco a poco.
Cuando comienzas a agradecer ves que mayores son las bendiciones que las aflicciones y como dice el refrán el tiempo pasa volando pero
“ Eben-ezer: Hasta aquí nos ayudó Jehová. ” Siempre y por siempre.
