Un día como hoy – Lunes

Quizá recuerdes la locura de ayer. La gente gritando, con sus ramas de palma, diciendo que Jesús era el rey. Uf. Tanta emoción. Algunos incluso dicen que lo de ayer fue una manifestación política: la gente mostrando a los romanos que podrían tener un rey judío, uno que se plantara frente a César.

Pero están lejos de la verdad. Si ayer Jesús entró en un burrito es porque él trae paz. No viene a desafiar al sistema político, sino aún más al religioso. Por eso es que lo de hoy fue sorprendente. ¿Ya te contaron?

Jesús fue hoy al templo. Me imagino que quería mirar una vez más aquella edificación tan imponente que construyó Salomón como casa para Dios. Quizá quiere mirar el velo aquel que separa lo santo de lo santísimo. Uf, tanto culto a ese velo, a ese dormitorio. La gente aún no comprende que puede hablar directamente con el Padre. Tantas cosas por cambiar.

Lo sorprendente de hoy fue que al llegar al templo encontró a los vendedores de ofrendas y a los que cambian el dinero por monedas del templo. Mucha gente llega al templo de Jerusalén con su oveja, paloma o medidas de harina para ofrendar, pero los sacerdotes y algunos malintencionados han hecho negocio de eso. ¡Le dicen a la gente que sus ofrendas no están “aprobadas”! Lo peor es que les venden la ofrenda a un precio mucho más alto del que deberían. Han hecho negocio en la casa de Dios.

Jesús volteó hoy las mesas de esos negociantes fraudulentos. Y hablando de negociantes, en la tarde fue a casa de Lázaro y se quedó hasta la cena. Algo hermoso sucedió: María lavó los pies del Maestro con un perfume que con el aroma llenó toda la casa, que hermoso detalle. Pero Judas, siempre Judas, se quejó de la ofrenda de María. Se puso a hacer cuentas y dijo que con ese dinero podían haber hecho otras cosas. Más preocupado del costo que del detalle. 

Es tarde, ha sido un día largo. Estoy un poco cansado, pero a la vez sorprendido, el Maestro es increíble. Tiene la tranquilidad para recibir a los niños, la humildad para dejar lavar sus pies por María, y la firmeza para reclamar a quienes quieren lucrar con la fe de otros. A mí se me hace que lo de hoy no lo pasarán por alto los sacerdotes. Jesús hoy confrontó a los religiosos estafadores, y dudo mucho que se hagan los desentendidos.

Comunicador, enfocado en trabajo con juventud y adolescencia. Empecé a escribir mi blog de vida cristiana en el 2012. Compartí reflexiones semanales durante 5 años, hasta que en el 2018 decidí dar un paso más y decidí crear Reflexiones de bolsillo, un sitio web donde escribo junto a grandes amigos sobre adolescencia, juventud, fe, Dios y vida cristiana.

Site Footer